We’ve updated our Terms of Use to reflect our new entity name and address. You can review the changes here.
We’ve updated our Terms of Use. You can review the changes here.

Adolfo Prieto 232

by Domingo En Llamas

/
1.
Conocíamos esos atardeceres veloces y un sol de carreteras, un filo de nostalgias parranderas, un barco de especias, una estrella anisada, un caballo de cola empotrada, costura amarga de amapola, y supusimos otras latitudes, desenfrenos, toldos especiales para aludes, para cuando dudes, para Nochebuena, para tu ensalada de guayaba y hierbabuena, para el doblez de tu persiana, tus donaciones al convento, para el pájaro sediento en Uribana, tu rastrillo trazando un pentagrama y unas treinta millones de personas estallando en tus proclamas, haciendo lo que siempre amas, suponíamos que los ataques feroces había que aguantarlos como fuese, fuego al cese, con toda la artillería, bastimento, municiones, hielo, bala fría y el recuerdo de su parodia de Boves en la carnicería donde pudo haber caído preso ¿Sabías eso? Repetíamos aquellos cantos atroces y hacíamos piruetas con candela de la misa a la escuela, mira al gallo afilándose la espuela y sí, conocimos tanto esos atardeceres veloces de sombreadas carreteras, de nubes con goteras que alineaban las miradas con las voces y ahora es preciso sacudir la retirada cruzando la vereda alumbrada, tronando el esqueleto y viendo llegar la barahúnda, una multitud refistolera y furibunda, escúchame, por los lanceros que nos quedan: es ahora o nunca.
2.
Ramiro es aquel gato insospechado, felino que capado y sin aviso se encarga de asumir un decomiso: mi caja de galletas ¡pan rallado! El gato que aparece en cada casa robándome la taza de semillas, quitándole la antena a las polillas, lamiendo los carbones de la brasa. Comiendo pan de leche con sardina, limpiándose los dientes con la espina, rompiéndole las medias a la bruja. Osado ha sido siempre y me apretuja el gato con espuelas de acuarela, experto en deshojar la mortadela.
3.
Tengo un revolver, a veces lo ensalso en baño de maría, otras veces lo cundo en agua fría, es un revolver disparatado que percute melodías expansivas en tu cintura, en la mía o encima del tapete de la barbería, lo miro sin decoro y sin saber siquiera si podría usarlo por contexto o por iniciativa. Tengo un revolver que curo con popelina, si se encosquilla lo sobo con sal marina y lo exfolio con mano firme, tiene una mira tan cristalina que arroja tildes, hinca timbres, hace el trasbordo, si al cabo lo ruleteo me deja sordo, copiloteando la siesta con subidón de gasolina. A mi revolver lo pulo con leche de avellanas, a veces lo desvisto en las mañanas, lo recargo con la arena del gatillo, lo vuelvo un ovillo y lo uso como fomentera o como alivio ante la nube pasajera, si hay revuelta callejera recurro a métodos nuevos: harina, orina y huevos.
4.
¿Quién se ata de tu mano en la oración? ¿Quién lidera el conteo en los rosarios? ¿Quién planta corazones victimarios? ¿Quién borra los recuerdos con arpón? ¿Quién sube mi montaña sin bastón? ¿Quién quiere remediar su mal de ardores? ¿Quién cura el pecho por do hubo amores? ¿Quién brilla amordazado en su rincón? ¿Cuál vacío se llena con la siesta? ¿Cuál jamás representa el no tener? ¿Quién raspa serpentinas en tu fiesta? Y ¿a quién le prohibiste renacer? ¿Qué habrá de escandaloso en destruir? ¿Quién destroza las cartas sin abrirlas? ¿Quién guarda de recuerdo las esquirlas? ¿Qué infiere con su risa el porvenir? ¿Qué edad transcurrió en un santiamén? ¿Qué pulso tiene el ritmo sepulcral? ¿Quién quitaría el bien al santo mal? Y ¿qué maldad resiste a amar su bien?
5.
Fugaz la gloria en la explosión, siempre de extraña duración, eterna gloria de un segundo que llega del después mucho antes de empezar. Fugaz la gloria en la explosión. Curioso espasmo en la quietud, sobrante en toda plenitud, desordenando las espigas y del agua brinca un sol que se lo traga un pez. Curioso espasmo en la quietud. Bajó el telón de amanecer, oscuridad de renacer, midiendo el músculo en la hormiga y luego la señal: No hay nada más qué hacer bajo el telón de amanecer. Recién acantilado, apenas reestructurándonos los lemas y un cuerpo nuevo en la quebrada y otro en Parque 3 y otro en Sans Souci. Sic transit gloria mundi.
6.
Extractos de ruedas de prensa de Marcelo Bielsa.
7.
Érase un curioso subibaja en la balanza amarrada al sebucán, de un lado una naranja diste, del otro dos limones dan, el sol de las mañanas masajeaba su dialecto y verbalizaba en su columpio de baile donde el gato con portayesquero de fraile tamizaba el viento, luego nos talló el trayecto junto a las abejas, zumbando el bote rastra abajo para cercarte la guarida, a su bandera se le sembró una escuela y una nasa, él es su casa. Érase una vez un cuento amarrado a una barriga, una música de 8 dientes, un tambor de semilla que apuraba un silencio en calderón como en una película sin cielo ni sermón, cinco manos en los dedos y un avión de plataína como el arco al violonchelo, duerme en el zumbido salamandra de puntillos, triple corazonada, sobrada sumatoria. Un día la jirafa perdió la veleta en un tropiezo con una bandada de corocoras y en selva abierta y buscando orilla encontró a Salvador pescando en la bahía.
8.
Jacob 02:58
Con sus ovejas Jacob usaba varias técnicas empíricas para mezclas rudimentarias. Parches genéticos de intuición soberana le daban resultados inequívocos cada mañana. Rayas azules paciente les trazaba y aparecían en los descendientes sin mayor traba. Con materiales del telar en bandejas soñaba coloreando los codos de sus ovejas. Y si quería sus camadas con rabos ensortijados, se los enroscaba de los guayabos. El le amarraba en las pezuñas cueros, proveyendo por siempre de calzado a los potreros. A las hembras las decoraba con cintas, tan noble, solo le reclamo que se gastó mis tintas. Sus favoritas animaban a todas: las más tercas, las más fuertes, las vivas, las más beodas. Le refutaron prácticas y teorías pero nadie creía en cromosomas ni en fantasías. Les diseñaba pronósticos de altura, futuribles de raza permutable con su pintura.
9.
Interludio 02:40
10.
En el jardín colgante ubicado en lo que hoy en día es la Avenida Baralt vi una criatura desnuda y desproporcionada que excavaba con muñones gastados y sin uñas, había dejado el corazón en un guacal salvándolo del polvo y del sereno cuando comenzó una floración dorada en la ladera sentido norte, debajo del cuadrante central, par biomagnético de ambos ojos. Durante el período de lluvia la cabellera del jardín colgante llegaba hasta los 3 canales de ida y los 3 canales de vuelta de la Avenida Urdaneta, se anudaba entre los dedos de la criatura que ya se había instalado entre ambas vías, en principio un paso comercial para distraídos, hoy día una plancha de hielo seco en el hombrillo. Había mediodías de neblina, de congelamiento frutal de los mercados, de vestimenta aterciopelada en la alfarería, contratiempos en la fundación orfebre y tendones crujientes en las caballerizas, móviles colgantes de pájaros que nunca pudieron llegar a la flor y paralización en la hora loca del bachaco y en el arrítmico soplo de la hormiga. Era imposible descifrar las especies que ahí se hallaban, había palmas horizontales de hoja rizada, orquídeas con fuentes internas, aguacatones que frutaban huevos de avestruces sin clara ni yema sino con carne de mango sin semilla, ideal para mascarillas. Una vez se dio apio España, pero lo llamamos célery. Asumiendo de forma desigual las prioridades se dieron cuenta que había planes que se sobreponían a otros y que finalizaban antes de emprender la gesta, mientras tanto engordaba la palma mora, la lavanda, el desacierto, brotaba barro y onoto con los que se prensaban unas panelas pesadas ideales para hacer crecer la maceta del jardín colgante. Nos dividíamos entre nativos y coleadores, ambos bandos guardábamos un sentido de pertenencia similar al del mar y la arena, al de la luna y la Tierra, en fin, cosas de extraños. El fuego noble se avivaba en los nidos, bajo tierra, en la eclosión y en los alevines, desde aquella época se ha escuchado pirotecnia en las zonas aledañas, pero solo se oye, todavía no se ha visto nada.
11.
Buscando voy, miro con un globo de marfil, como busco entre peces sus reses posiblemente el recado lo halle en 3 meses, se adentra, enfoca bien, se centra. Se busca pero no se encuentra. La inundación está controlada pero un chasquido freático retumba, se escucha toda presencia aunque lo refute su ciencia, sus dedos de frente, su dardo con dardo. Se faja, midió mal, ya no entra. Se busca pero no se encuentra.
12.
Religión I 02:51
Sorpresa líquida y fresca. Para las damas, licor fino. Cruda etiqueta en un torbellino de carretas tiradas por bicicletas, gente llegando en el pulso de vector que define el salto de la roca a la cascada. Triunfando entraban con sombreros de rieles, pitillos de pieles, iniciales en la solapa, en el corbatín, en el folleto del maletín. Algunos escupieron por moda, yo me asumí en la coda, me puse mi cámara en la frente y me encajé la mente. Exhibíase frutería de temporada, los cambures en ganchos, afuera los guardias vociferando bajo un chubasco, y en el cielo hubo un cortocircuito que me dejó solo hablando. Llegó el perito, oremos. Ya volvemos. Cuánta actividad diversa: la vuelta al circuito, bailes en reversa, desafíos estéticos al erudito, balanceo sobre lámparas, clavados desde la tarima, conjeturas sobre el caos, sobre el clima y una voz desesperada en tus alturas. Jamás cedimos ante el asedio ni por lo que aparecía en los medios, mucho menos creímos en jirones en las vestiduras ni en barricadas de piedra y basura. Hay un surco mal cosido en la cabeza del río. Continuando en la línea de ritmos futuristas: Los rezos adquirieron un cariz contorsionista y en los corazones invadió enseguida un hormigueo como el de la lombriz cruzando la autopista, como el lisonjeo retráctil del meneo.
13.
Girasoles 01:03
14.
Religión II 03:41
Presumía del producto primitivo, parecía palabrear precipitadamente las pocas pretensiones que personeros palangristas plasmaban en pétalos de palma preparada, para preveer palizas policiales pasé de perseguido a pregonero, de peatón a pastor de paso que poco a poco prescindió del presente para preparar la prenda de plomo y plumas. Decodificó el delirio durante danzas desordenadas de duraciones diversas y de diminutas desafinaciones. Delicioso. Definitivamente deambular día a día descifrando dardos deshilacha el desvelo, desapareciéndolo dasairada, desvergonzadamente. Desventajas: distraído, disuelto, desheredado, desmenuzado, diverso, decolorado, dorado, duro. Conseguí creolina en crema, con claridad cerní el costal de cáscaras en un claroscuro cadencioso en los cafetales, cerqué la cruz con cadenas y comencé con cascadas de cuñete que cálidamente cargué codo a codo con comandos copeyanos y con consejos comunales clasistas y con cada cual colisioné catastróficamente. Ese espectro escondido es esencialmente el elemento estudiado en estas esferas, en él encontramos estremecidos en el espectroscopio ecos, enredaderas, entonaciones, éter, escamas en escabeche, edecanes, ediles, eses, efes, erres, emes, estacas, entremeses, enjambres enhebrados en el estanque, estímulos, etc. Imagínate: Isaías instaba ilusionado, inocentemente iniciaba impensados e impuros intentos, internacionalmente idealizado Isaías imaginábase incordiado, irremediablemente indefenso. Igualmente idolatrado íbase incorrupto, invulnerado, infinita e inexplicablemente incrédulo. Incomprensible inconsistencia imaginaria. Me monté mareado en la malla, me mecían majestuosamente mientras el monstruo manchaba mis manos con miel, misteriosamente mucha minoría martillaba en el mítin, masificaron misiles de monumental millaje que mezclaba microbiología y magia con militarizaciones, malgasto de malentendidos, una moderna mezcolanza.
15.
Hinojo, tangelo, papa colombiana, camarón, tajalí, jaibas, atún rojo, perejil liso con ajo para el mojo, langostinos y arroz, lechuga romana, caraotas rojas toda la semana, albahaca morada, llegó cebolla, yerba mora, manteca, chicharronada, el cabrito, frijol chino, bordón de olla, raíz de onoto, lentejuela importada, chucho colgado en salazón: una joya. Caña exprimida, bicarbonato, ocumo, zapatos de celuloide, salvia fresca, en otro pasillo hay conato de gresca y si por curioso me dan pues lo asumo, jamás se utiliza la palabra zumo, mira ven, mira esa gorda y esbelta gallinita viva, la gallina envuelta, tomillo, miel, mortadela de tapara, corretea el pasillo una gata suelta y un cadete me habla sin verme a la cara. Vivo, palpitando, otrora San Jacinto, velas, desayuno, cebollín, salchichas, frente al merey casi siempre te encaprichas y chocón te alebrestas cual gallo pinto, ya te marearon con el vino tinto y con las naranjas del saco de red, siempre suelto, en calma, ruido, luces, sed, imaginación en baile de primera, un cordero entre la danza y la pared, la vida breve ventilada en la espera. Espárragos, sal gruesa, rabo, aceitunas, en los quesos: Santa Bárbara y Palmita, coliflor y berro sembrado en comunas y brócoli alzado con agua bendita: amorío tapado del sibarita, de barbarito cherry con achicoria, conejo, vainitas, uvas, zanahoria, cardo santo, café de Boconó, ajíes, panelas traídas desde La Victoria, vende al señorío con ñapa y no fíes.
16.
El plano 01:15
Extractos del "Curso de apreciación musical" de José Antonio Calcaño.
17.
De acuerdo a los sucesos cotidianos y al índice de atraso en buenas nuevas les presento unas pruebas que espantarán villanos de billares, con hábiles cantores que no escatiman en ganarse honores. Se trata de impedir las primaveras a costa de evitar que el grillo cante, que el sol no se levante y andar con esas fieras que tienen al acecho el nuevo acento al momento de hablar de su talento. Quedé petrificado en el momento bebiendo información de sus embrujos, empujan sin tapujos, pesado hacinamiento, cerca estuve de voltear la mesa y me detuvo mi licor de fresa. Vi el desastre en aquel ruin cuarto oscuro repleto de pesados y arribistas, de atados y egoístas con crestas de zamuro, con parches e imperdibles en los ruedos y tragos agitados con los dedos. Los ogros del vapor de podredumbre también llamados "ángeles sin normas" se van de todas formas con esa pesadumbre a intentar desfilar sus gruesas prendas, sus disfraces de dril, sus sueltas riendas. ¿Será dulce la piel de esas cadenas? me pregunto un segundo, vuelvo y sigo al crimen sin castigo pateando colmenas, sé de lo que he hablado amigo mío ¿Son saladas las piedras de ese río? Le temen al carmín los monstruos porque todo color mitiga el sufrimiento, escúcheme un momento y por Dios no me ahorque, yo soy también un lobo confundido, queriendo llegar termino perdido. Un nuevo axioma aprendo con cuidado y lo uso con sus vicios y detalles, espero que no ensayes mi léxico ya usado porque eras de las hordas ultra rancias que siempre me alargaba las distancias. Ya queriendo huir y no hay salida abierta nadie alerta y ni un acorde que enganche, "Disculpe que le manche su túnica de oferta" le dije al derramarle mis pinturas tan cerca de ahogarse en sus locuras. Es hora de atender las buenas nuevas con pálpito de gato decidido, pesado y abstraído, con calles en las cuevas y siempre con el pecho adolorido de tanto arrinconar al confundido. Mientras tanto recojo mis atriles y veo de reojo sus excesos, su afán, sus retrocesos, su error con los alfiles, y arreglo con amor mi escapulario que ayer me traje del confesionario. Y luego lo de siempre en mis procesos: tratar de retorcer mi propia lengua y morirme de mengua temblando entre los rezos, capaz tendré que hacer mil concesiones y hacer más comerciales mis canciones.

about

Grabado en vivo entre abril y mayo de 2014 en La Madrigalera, ahí también se hicieron las grabaciones adicionales.

Grabado, mezclado y masterizado por Moisés de Martín.

Foto de portada: Simón Hernández.

credits

released November 6, 2015

Enrique Pérez Vivas: Bajo.
Simón Hernández: Batería.
Juanma Trujillo: Guitarra.
José Ignacio Benítez: Guitarra, teclados y voz.

license

all rights reserved

tags

about

Domingo En Llamas Caracas, Venezuela

Todos los archivos están en .wav l 16-bit l 44.1

contact / help

Contact Domingo En Llamas

Streaming and
Download help

Report this album or account

If you like Domingo En Llamas, you may also like: